5/15/2011

Amores banales

Mi chica está llena de mierda,
y me gusta.
No es una metáfora.
Lo constato de vez en cuando,
los días en que su pequeño agujero trasero
acoge mi polla insaciable.
Durante unos minutos la dejo allí dentro;
es un lugar sucio y acogedor:
el vertedero de nuestro gran amor.